De la citada cantina para abajo, no había mas que pequeños ranchos con pajas y multitud de árboles como mangos, naranjos, sauces, saúcos, malvaviscos y vallados construidos con piedras y cubiertos con matas de pencadera y de cabuya, hasta llegar a una casa grande de propiedad de don Antonio Orrego la que dejaba ver una enorme puerta trancas que daba entrada a una extensa manga en donde había un elevado morro de tierra amarilla, el que ha sido convertido en el barrio llamado "El Hoyo", fundado este por doña Rafaela Moreno de Orrego; casa aquella en que mas tarde funciono una de las agrupacions de las Escuelas públicas de Medellín y en donde en parte estuvo la afamada cantina de "Campo Alegre" la que quedaba frente al puente de "la Toma", cantina aquella en donde el poeta Abel Farina improvisó sus primeras estrofas ante "una flor de baile" cuando dijo: "Es una flor que en la noche como la esperanza abierta, a dulces sueños convida de reposo y de inocencia. Mas si la mañana fría el cerúleo tul despliega, marchita está, sin olores. Como la esperanza muerta".

Carlos J Escobar G
Medellin hace sesenta años
Es un relato de los años 40 sobre los barrios que bordeaban la Quebrada de Santa Helena 60 años atrás (1880 - 1890).
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